Tenía en casa un cuadro de una lámina que se había roto el cristal y después de darle vueltas, se me ha ocurrido como reciclarla. De una forma muy fácil, barata y con un resultado de lo más original.
Con piedras de playa. También pueden ser cantos de río, pero es más complicado encontrar de un tamaño pequeño y plano, para este trabajo.
Se pueden colocar las piedras para dar forma y crear lo que nuestra imaginación nos permita.
Después de seleccionar las piedras según tamaños y formas, las he colocado encima de la lámina para hacerme idea de como va a quedar. En este caso es una pareja abrazada y una luna.
Primero he pintado la lámina con pintura acrílica (blanco roto que me sobró de pintar una pared). He aplicado unas dos o tres manos hasta cubrir el dibujo. Una vez seca la pintura vuelvo a colocar las piedras y para dar más sensación de paisaje le he colocado unas ramitas secas. Con las piedras también queda muy bien incorporar alambres o trazos dibujados sobre el papel para completar el dibujo hecho con las piedras. Tanto las ramas como las piedras las he pegado con silicona caliente (de la que se aplica con una pistola eléctrica y viene en barritas).
El resultado es éste:
No me convencía mucho el marco de madera y para darle un toque más actual lo he pintado con la misma pintura de paredes, un poco rebajada con agua para que no quede la madera demasiado cubierta y así conseguir un efecto envejecido o tiza. Y este es el resultado final.